viernes, 29 de junio de 2012

CERCHA-PUENTE DE ESPAGUETI

El post de hoy, a pesar de breve, espero que resulte entretenido. Se trata de una práctica especial que hemos realizado  Alberto González Fariña, Álvaro Núñez Navarro, Saúl Muñiz Eiras y yo, para la asignatura Estructuras I y II de Arquitectura técnica.

La práctica consistió en elaborar una cercha-puente de espagueti para salvar una luz de 60cm.
La confección de los nudos no contaba con una premisa inicial por parte del profesor (Manuel Muñoz), sino que la elección del sistema o material de unión entre  "barras", fue decisión de los alumnos. 

En nuestro caso, optamos por la cola termofusible debido a la facilidad constructiva y la buena adherencia que ofrecía. Así como la escasa rigidez, lo cual ayudó a que los espagueti no rompieran tan fácilmente. De manera que al permitir las deformaciones de los nudos, conseguimos que los espagueti trabajaran a esfuerzos lo más centrados posible, bien de tracción (más beneficiosa) o compresión.



Por último, la cercha-puente fue sometida a una prueba de carga con el fin de evaluar, de toda la clase, cuál soportaría más carga (colgada) y cuál alcanzaría una mayor relación carga/peso propio.



La nuestra (gr. 18), resultó ser la cercha-puente que soportó la mayor carga de clase, alcanzando nada menos que los 4653gr.





A continuación os dejo el vídeo en el que podéis ver el proceso de rotura de las diferentes cerchas realizadas por los alumnos de la clase. (La nuestra es la última).





jueves, 21 de junio de 2012

VIVIENDA UNIFAMILIAR MODULAR

El post de hoy, recoge parte del trabajo final de curso de la asignatura "Dibujo II" de Arquitectura Técnica, realizado por  y por Manuel Mosquera Seijo.

Se trata del proyecto de una una vivienda unifamiliar aislada, construida mediante la superposición y yuxtaposición de módulos realizados con materiales ligeros, de 2,7m x 6,0m, de manera que puedan ser transportados en camión, sin necesidad de transporte especial. 

El objetivo principal de la vivienda, es la posibilidad de construir la mayor parte de la misma en taller, para después transportar los módulos al tajo y realizar allí su montaje. Con la intención de reducir así los costes y períodos de construcción, sin penalizar la calidad.

La vivienda está formada por planta baja y planta alta según los siguientes planos. En las que se busca satisfacer todas las necesidades con el menor número de módulos, resolviendo el porche con la disposición de un módulo en voladizo y albergando el garaje bajo la terraza superior. Así, la superficie habitable de la planta superior, supera a la inferior, siendo el 56% y 44% respectivamente. 

PLANTA BAJA


PLANTA ALTA 








Por otra parte, cabe destacar que se consigue resolver ambas plantas con la misma distribución de módulos, lo que facilita considerablemente la unión  entre ellos. 







La unión vertical entre módulos queda garantizada al soldar la estructura portante del módulo superior con el inferior, que ya viene preparado de taller para tal acción.






La unión horizontal se resuelve mediante el "machihembrado" entre soportes. Para ello se realiza una caja y espiga que se asegura con un pasador de cabeza plana, que quedará enrasado.






Tras hormigonar la cimentación, única fase constructiva que se realiza en obra, consistente en una losa maciza con plintos o macizos, en los que se anclarán los módulos de planta baja, ya podemos iniciar el montaje. Con la esperanza de que se finalice el mismo y por lo tanto se podrá entrar a vivir  en un período máximo de 2 meses.
Los apoyos articulados permiten la libre dilatación de las vigas mientras que el movimiento de los módulos se impide mediante perpendicularidad entre ejes de giro.



La estructura portante vertical se compone de soportes metálicos tubulares cuadrados, de 10x10 cm y espesor 8mm. 




El cerramiento de fachada está  formado por  muros de tablero fenólico hpl (marino) de 5cm de espesor, fijados mecánicamente a los soportes metálicos de 10x10cm  y a unos soportes complementarios de 5x5cm con intereje de 40cm. Dichos soportes complementarios dispondrán de aislamiento térmico intermedio a base de lana de roca mediante panel semirrígido, espesor 30 mm e incluso en su interior a base de poliuretano proyectado, a continuación se deja una cámara de aire. Por último se dispondrán dos planchas de 12mm de espesor de cartón-yeso fijado a los soportes complementarios mediante perfiles conformados omega, en la cara exterior de la hoja interior se dispondrá una barrera de vapor con el objeto de evitar las condensaciones en la cámara de aire. 



Las vigas están formadas por el mismo perfil que los soportes, cerrando paños de forjado metálico.




Los forjados son unidireccionales formados por viguetas metálicas, de perfil tubular cuadrado 5x5cm y 8mm de espesor, con un intereje de  44cm. y aislamiento a base de poliuretano proyectado entre las mismas. Sobre dichas viguetas se dispone un tablero fenólico de 5cm de espesor sobre el cual se aloja un serpentín de tubo de cobre ø 2cm en el recrecido de mortero M16, que conforma la calefacción de suelo radiante. A continuación se extiende una lámina de protección de 1.2mm. 




Sobre dicho forjado irá solado en las zonas húmedas con su correspondiente mortero de agarre o bien suelo laminado sobre lamina de espuma de polietileno. 









Por último decir que los puentes térmicos en los soportes y vigas de fachada, se resuelven mediante la disposición de una lámina de composite tipo "Alucobond", que alberga el aislamiento térmico. 

















viernes, 8 de junio de 2012

HORMIGÓN TRANSLÚCIDO (PARTE 2)


HORMIGÓN TRANSLÚCIDO POLIMÉRICO

INVENCIÓN

En 2005 Joel Sosa y Sergio Galván, dos estudiantes de ingeniería civil de la Universidad Autónoma Metropolitana de Azcapotzalco, México, inventaron un hormigón capaz de soportar las cargas igual o mejor que el hormigón tradicional, pero que además, permite el pasaje de luz. Se fabrica igual que el hormigón tradicional, con cemento blanco, áridos finos, gruesos, agua y un componente llamado Ilum. 


La invención de estos estudiantes comenzó en 2004 con la invención del aditivo para hormigones de alta resistencia, Critum, que ha sido diseñado a base de una mezcla mineral con base en óxidos metálicos y de fibras. Con un efecto puzolánico reacciona y permite una mayor compacidad del material acomodando de una manera más eficiente las moléculas y componentes del hormigón. La utilización de este aditivo permite una disminución hasta de un 50% de la cantidad de cemento necesario en la fabricación y se logra el 80% de la resistencia final a los 7 días.


En el 2005 inventaron el Hormigón translúcido, gracias a la adicción en la mezcla del aditivo Ilum, aditivo que permite el paso de la luz y mejora algunas importantes características mecánicas. Es un hormigón polimérico a base de una mezcla mineral de óxidos metálicos, polímeros, áridos finos y áridos gruesos, con propiedades mecánicas mejoradas del hormigón, con niveles de paso de luz hasta de un 80%. Es resistente a la corrosión; además posee propiedades fungicidas, lo cual lo hace útil en aplicaciones clínicas y de laboratorios.


El impacto de este desarrollo tecnológico permitió a los estudiantes, tras patentar el nuevo material, ya que la base reside en el aditivo Ilum, constituir la empresa Concretos Translúcidos S.L.R. de C.V., la cual ha sido apoyada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) con 7.5 millones de pesos (420.000 €) para tramites de certificaciones y patentes. 


Su objetivo es crear una red de colaboraciones estratégicas en todo el mundo, de manera que el nuevo producto se pueda fabricar localmente en cada lugar, ahorrándose los gastos de transporte. Esto es posible gracias a que la fabricación del hormigón translúcido requiere la misma maquinaria que el tradicional. Para la comercialización en Europa, los inventores mexicanos se asociaron con el inventor húngaro Áaron Losonczi. La cementera italiana Italcimenti ha presentado una oferta para comprar la empresa. 

El hormigón translúcido ofrece ventajas ambientales, tales como la reducción en el uso de luz artificial, lo que permitiría una disminución en las emisiones de gases de efecto invernadero. El producto podría ser valioso en la construcción de edificios ecológicos, ya que posibilitaría la moderación e incluso mitigación del paso de calor, según fuente de Sergio Galván.

El hormigón translúcido polimérico puede ser vertido bajo el agua, por ello se utiliza en obras marítimas.

Una de las desventajas es que por su alto grado de transparencia, las armaduras quedan a la vista, lo que al cabo de un tiempo podría resultar antiestético. Pero se busca la forma de que con un buen acabado, los hierros y otros materiales de relleno, puedan ser agradables para la vista. Otra desventaja es su precio, que puede ser de 2.5 a 3 veces más caro que el hormigón tradicional. Desde el momento de su creación y comercialización, el cemento translúcido ha estado en un constante proceso de mejora tanto en su acabado, precio, estabilidad y translucidez. 

El último proyecto, en el que todavía siguen trabajando, es la investigación del hormigón conductivo, Electrum, que permite la transmisión de distintas señales como la energía eléctrica, telefonía y datos. 

PRODUCTOS Y CARACTERÍSTICAS

Hormigón translúcido vertido in-situ

Se distribuye premezclado para ser vertido in-situ, para ello se precisa una cimbra especial y de personal certificado por Concretos Translúcidos, para su aplicación. No se recomienda el trasporte en camiones hormigonera. 

Para su aplicación se pueden usar todo tipo de áridos pétreos porosos, no se pueden utilizar áridos orgánicos ni con superficie lisa. A la hora de armarlo, se puede utilizar un armado convencional, pero las cualidades de translucidez pueden verse afectadas por el mismo. A su vez, con el paso del tiempo, el deterioro del armado, al ser visible puede penalizar drásticamente la estética de nuestra estructura, por lo que se recomienda utilizar un armado especial.

La traslucidez de los elementos depende del espesor, así como del tipo y tamaño de los áridos pero podemos asegurarnos de que, por lo menos seremos capaces de reconocer siluetas. En cuanto a sus propiedades térmicas, sus fabricantes nos aseguran una mejor respuesta que el metal, el vidrio e incluso el hormigón tradicional.

En su ficha técnica, sus fabricantes enumeran una serie de VENTAJAS como:

Gran cohesividad.
Alta resistencia y durabilidad.
Presenta un aspecto uniforme.
Disminuye gastos en iluminación.
Se maneja en distintos tipos de acabados.
Apto tanto en interiores como en exteriores.
Puede pigmentarse con una alta gama de colores.
La translucidez puede ser moderada desde el momento de la fabricación.
Las dimensiones pueden adaptarse a las necesidades del cliente o del proyecto.
Menor fisuración y mejor comportamiento en comparación con el hormigón tradicional.
Por sus altas propiedades mecánicas, permite diseñar elementos de menor espesor.
Descimbrado a las  24 horas del vertido con un 70% de su resistencia final.

Características técnicas, validadas por el Instituto de Investigaciones de Materiales de la UNAM:

Resistencia a compresión: Superior a 45 N/mm².
Módulo de elasticidad en compresión: 2432 N/mm².
Resistencia a flexión: 59 N/mm².
Módulo de elasticidad en flexión: 205 N/mm².
Resistencia al ataque de sulfatos: Resistente a sulfatos de Calcio, Magnesio, Potasio y Sodio.
Resistencia al ataque de ácidos y bases: Resistente a los ácidos Sulfúrico, Clorhídrico y Sódico.
Resistencia a los álcalis: Resistente al hidróxido de Sodio, Potasio y Calcio.
Tiempo de vida: 50 años.

Hormigón translúcido prefabricado

Para facilitar su aplicación se distribuyen placas prefabricadas, con las mismas características.

Dimensiones:
          o 30 x 30 cm.
          o 50 x 50 cm.
          o 60 x 60 cm.
          o 120 x 60 cm.

Espesores:
          o 2 cm.
          o 2.5 cm.
          o 5 cm.